Los laboratorios de la Estación Experimental del Vidrio disponen del instrumental más completo para la caracterización mecánica de los envases de vidrio. Nuestros técnicos especializados brindan soporte a la industria del vidrio en la elección de las metodologías adecuadas de ensayos normalizados, en la eventual definición de procedimientos y de equipamiento de prueba personalizados así como en la interpretación de los resultados de los análisis.
La naturaleza frágil del vidrio impone que la evaluación de la confiabilidad y de la resistencia mecánica de los productos se efectúe sobre una muestra estadística suficientemente representativa.
La medida de la resistencia a la presión interna de botellas y frascos resulta de particular importancia en el caso de envases destinados a contener bebidas ricas en anhídrido carbónico (gaseosas, cerveza, vinos espumantes, etc.), pero es comúnmente aplicada además al resto de los contenedores en tanto que puede someter a esfuerzos de tracción (consecuencia de la presión hidrostática) a toda la botella, con la gran ventaja de la confiabilidad del control de las prestaciones (todos los posibles defectos / concentradores de esfuerzo son de hecho puestos en función).
La prueba es llevada a cabo siguiendo la norma UNI EN ISO 7458:2004 Envases de vidrio, Resistencia a la presión interna. Métodos de prueba, o bien según el método B de la norma ASTM C 147-86 (2005) Standard Test Method for Internal Pressure Strength of Glass Containers.
Sea durante el ciclo productivo, que durante el transporte o su vida útil, los artículos de vidrio son expuestos repetidamente a golpes entre sí o con otros objetos, por lo que la resistencia a esta tipología de esfuerzos imprevistos es de crucial importancia para definir el nivel prestacional y de seguridad.
La prueba mecánica es llevada adelante siguiendo la norma UNI 9302:1988 Envases de vidrio. Determinación de la resistencia mecánica ala golpe, y a diferencia del ensayo de presión interna, puede ser efectuada incluso sobre productos con bola ancha como jarros, copas o vasos.
La resistencia a las variaciones rápidas de temperatura es particularmente importante en caso de los envases para productos farmacéuticos o alimentarios destinados a ser rellenados con líquidos calientes o fríos (por ej. Salsa de tomate), o a sufrir ciclos térmicos de pasteurización, esterilización o liofilización, o bien por la lavavajillas.
La prueba para la determinación de la resistencia al choque térmico es llevada a cabo sumergiendo completamente los productos de vidrio en una batea termostatizada conteniendo agua caliente (baño caliente) o bien frío (baño frío), y sacándolos rápidamente y repetidamente de una a la otra según los tiempos preestablecidos; mayor es el número de ciclos soportados y/o mayor la diferencia de temperatura entre las dos bateas necesarios para llevar los ejemplares a la rotura, mayor será la resistencia al choque térmico de los mismos.
Regulando oportunamente las temperaturas y los tiempos de prueba, el ensayo puede ser llevado a cabo con conformidad con el método B de la norma UNI 9303:1988 Envases de vidrio. Determinación de la resistencia mecánica ala golpe, o según las normas UNI EN ISO 7459:2004 Envases de vidrio. Resistencia y durabilidad al choque térmico, o ASTM C 149-80 Standars Test Methods for Thermal Shock Resistance of Glass Containers.
En el caso de los artículos de vidrio borosilicato o los que hayan sufrido un tratamiento de templado, generalmente resistentes a diferencias de temperatura superiores a 90ºC, la prueba es llevada a cabo según el método A de la norma UNI 9303, que prevé el uso de una mufla en lugar de un baño caliente.
La resistencia de los envases a las cargas axiales de compresión es una propiedad particularmente importante en la fase de tapado o durante el almacenamiento en pallet superpuestos. Su determinación es llevada a cabo según norma UNI EN ISO 8113:2004 Envases de vidrio. Resistencia a la carga vertical. Método de ensayo.
Las líneas de producción, embalaje y embotellamiento inducen a un progresivo deterioro de la resistencia mecánica delos envases de vidrio, a causa de los continuos golpes y roces entre ellos mismos o con los equipos del proceso.
A fin de simular este característico daño denominado “scuffing” o rayado, la Estación Experimental del vidrio está dotada de un instrumental específico llamado Simulador de Línea, en el cual una cantidad de botellas son puestas en rotación en torno al propio eje de revoluciones alrededor de un carrusel, simulando así sustancialmente las condiciones operativas de una típica línea de embotellado.
Efectuando pruebas mecánicas sobre un número estadísticamente representativo de contenedores del mismo lote sometido o no al pase por el simulador de línea es posible apreciar el desmejoramiento de las prestaciones de resistencia mecánica inducidos por fenómenos de scuffing.